¿Por qué cerramos los ojos cuando besamos?
Casi todos cerramos los ojos cuando besamos; somos los únicos animales que podemos amarnos, poseernos, aparearnos cara a cara, teniendo frente a nosotros el rostro y los ojos del compañero o la compañera. Y, sin embargo, en el momento de la cercanía, del beso íntimo o de la máxima entrega, solemos cerrar los ojos.
El hecho es que acostumbramos a cerrar los ojos al besar, aunque a menudo sin ser conscientes o caer en la cuenta de ello. Y aunque quizá son pocos los que en algún momento habrán llegado a preguntarse explícitamente a qué se debe semejante proceder, muchos son, en cambio, los que se quedan sorprendidos al percatarse de comportamiento tan común y habitual.
En El Madruguete hablaremos de éste interesante tema el miércoles 11 de junio, en punto de las 6 de la mañana por RADIOMÁS, la estación de los Centroamericanos.