¿Miedo a la vacuna contra COVID-19? Mitos y realidades
Ale Mota | Sano y Veracruzano
Desde que se empezó a hablar sobre el nuevo virus que estaba causando estragos en la ciudad de Wuhan, China, hasta la fecha, los mitos y noticias falsas sobre la epidemia de Covid-19 no han hecho más que multiplicarse.
Ahora que la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios COFEPRIS, aprobó el uso de vacunas contra el COVID-19 de distintas farmacéuticas como Pfizer, Cansino y Sinovac y han comenzado a distribuirse, existe cierta resistencia de la población mexicana a vacunarse por el temor a que sea contraproducente
Al no existir un tratamiento específico y eficaz contra esta enfermedad, la vacuna se convierte en la herramienta más valiosa para controlarla, por ello en Sano y Veracruzano, hemos recopilado una serie de mitos y realidades que le llevarán a tomar una decisión informada.
Mito: “las vacunas no son seguras ni eficaces porque se desarrollaron muy rápido”
Realidad: Gracias a una colaboración científica y gubernamental sin precedentes, la obtención en tiempo récord de vacunas eficaces contra la COVID-19 fue posible. La investigación que se había hecho sobre virus similares desde muchos años atrás, los avances tecnológicos en la producción de vacunas y las grandes inversiones permitieron a las compañías farmacéuticas avanzar más rápido y optimizar el tiempo al ejecutar algunas etapas de los ensayos clínicos en paralelo.
Mito: “si recibo la vacuna, me enfermaré de COVID-19”
Realidad: Las vacunas protegen al organismo de enfermedades futuras y potencialmente peligrosas enseñándole al sistema inmune a identificar y luchar contra los invasores. Lo mismo ocurre con las vacunas que se desarrollaron contra la COVID-19. Si bien es cierto que las vacunas pueden causar efectos secundarios, éstos en su mayoría son leves y reflejan la respuesta del cuerpo a la vacuna.
Mito: “una vez reciba la vacuna, podré dejar de usar cubrebocas”
Realidad: las personas que se vacunen deberán continuar aplicando las medidas de protección, como el cubrebocas y el distanciamiento social, hasta que haya una nueva recomendación al respecto. Es importante comprender que la protección que se obtiene con la vacuna no es inmediata, sino que conlleva tiempo. Además, la vacuna no impide que el virus entre en el cuerpo, solo evita que una enfermedad moderada o severa se produzca.
En Sano y Veracruzano le presentamos esta información sustentada en los ensayos del Dr. Jan Felix Drexler, quien es virólogo y profesor de la Clínica Universitaria Charité de Berlín y dirige delegaciones que ayudan a los Gobiernos latinoamericanos en su lucha contra el nuevo coronavirus, esperando que con ello podamos ayudarle a tomar una decisión informada sobre la vacunación.