Jiménez Mabarak y Emilio Carballido, dos talentos para la ópera

• RADIOMÁS difunde, en primicia absoluta, “Misa de seis”, ópera de Carlos Jiménez Mabarak con libreto de Emilio Carballido
• Partitura estrictamente atonal que se difunde a 29 años de la muerte del notable compositor mexicano.

Jorge Vázquez Pacheco

Xalapa, Veracruz. – El talento de dos personajes representativos de la cultura nacional se conjugó para dar forma a una partitura que marca un hito en la creatividad operística: música de Carlos Jiménez Mabarak y texto de Emilio Carballido, en “Misa de seis”, drama escénico en un solo acto estrenado en 1962.
El texto del dramaturgo veracruzano (originario de Córdoba) es una breve historia de corte realista que otorgó al compositor de raíces tuxpeñas (su madre fue la escritora y diplomática Magda Mabarak) la facilidad para trabajar sobre un drama que transfigura lo cotidiano en dialogo. Esto le permitió explora líricamente un trágico momento en la vorágine vital propia de la Ciudad de México, el encuentro de una anciana con un mozalbete, escena que cobra notorio énfasis poético aún con el recurrente empleo de expresiones coloquiales. El tratamiento musical es eminentemente dodecafónico, aderezado con breves modos tonales y diálogos esporádicos, todo intercalado en la medida en que el desarrollo lo exigió.
Como breve retrato de las miserias cotidianas, el contexto para “Misa de seis” se ubica en la Plaza de San Sebastián, en las inmediaciones del barrio de Tepito y en una madrugada de invierno. Nos remite a la singular vivencia de una anciana llamada Lola, quien sufre la nada agradable experiencia de ubicarse en las cercanías de la escena de un asesinato, mientras espera que en el templo se abran las puertas para permitirle asistir al primer oficio religioso del día. Es la circunstancia que da su nombre a la partitura.
Pero aquel elaborado lenguaje musical no resultó del agrado del público y la función de estreno fue un fracaso, seguramente debido a que los asistentes al Palacio de Bellas Artes no esperaban una música tan “indigesta” y complicada para los gustos de la época. Pese a todo, “Misa de seis” es observada hoy como importante realización en el panorama de la música nacional y se mantiene a la espera del aprecio que realmente merece.

El hijo de la escritora veracruzana
El compositor que nos ocupa fue hijo único de la escritora y diplomática veracruzana de origen libanés María Magdalena (“Magda”) Mabarak, nacida en Tuxpan en mayo de 1899 y muerta en la Ciudad de México, en junio de 1983.
Autor de múltiples facetas y extraordinariamente productivo, Jiménez Mabarak mostró hacia la etapa intermedia de su periplo creativo una especial inclinación hacia las técnicas de avanzada, gracias a su preparación en Europa bajo la guía del importante teórico y director René Leibowitz, así como su trabajo en los Estudios de Música Concreta de París. En su catálogo encontramos música sinfónica, de cámara, canciones, obras para piano y música para ballet, además de partituras para la cinematografía; renglón en que fue reconocido con dos premios Ariel. En la totalidad de su obra es posible detectar una tan elogiable como absoluta libertad de ideas creativas.
Las partituras de Jiménez Mabarak que registran mayor celebridad son sus cinco “baladas”, concebidas como música coreográfica y denominadas así en atención a la etimología del término, que procede del latín “ballare” (bailar). Esto, a la par con sus dos óperas, ejemplifica su aguda sensibilidad para el drama escénico.
Huérfano de padre desde los cuatro años, su madre asumió responsabilidades como diplomática, por lo que su educación primaria la hizo en Santiago de Chile y después en Bruselas. Fue depositario de numerosos premios y reconocimientos, y su Fanfarria para metales fue seleccionada por el Comité Olímpico Nacional como promocional para los Juegos Olímpicos de 1968 en la Ciudad de México.

La fructífera época de Trigos en Oaxaca
El registro discográfico para esta emisión data de 2016, en la primera grabación para la opera del autor que nos ocupa y se logró durante la fructífera gestión del director mexicano Juan Trigos al frente de la Orquesta Sinfónica de Oaxaca. Gestor de resultados prodigiosos, Trigos sumó a la renovación en el repertorio de la agrupación un considerable número de realizaciones disqueras en que se destacan las sinfonías de Jesús Villaseñor, conciertos de Víctor Rasgado, sinfonías del propio Trigos y la ópera “Misa de seis”. Todo como iniciativa si precedente y logrado milagrosamente, diríamos, en virtud de la eterna e injustificada carencia de recursos financieros.
En la grabación que se difunde este miércoles a las 21 horas por Radio Más, ubicamos a dos intérpretes originarios de Xalapa: la mezzosoprano Gabriela Flores Nachón, quien actualmente desarrolla su carrera artística en Europa, y el barítono Benito Navarro, experimentado integrante del Coro de la Universidad Veracruzana identificado con la producción escénica del recientemente fallecido Víctor Rasgado.
La primera grabación mundial de “Misa de seis” de Carlos Jiménez Mabarak (¡sorprendente e inmaculadamente bien lograda!) con la Orquesta Sinfónica de Oaxaca, Juan Trigos como director y elenco totalmente nacional, podrá sintonizarse este miércoles 14 de junio a partir de las 9 de la noche, en 107.7 de frecuencia modulada y en www.radiomas.mx

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