Fin de año: los rituales
Hola, amigos y amigas de Radiomás ¿qué tal? Espero que se encuentren muy bien y que estén pasando unas vacaciones navideñas muy lindas junto con su familia. Soy Daniella Yorio, integrante de En Onda Radial. Yo les vengo a platicar un poco más sobre esta festividad que año con año disfrutamos con mucha alegría.
En la celebración del año nuevo recordamos los mejores momentos del año que está por terminar y esperamos con ansias el comienzo del próximo. ¿Cómo lo celebran ustedes? Yo, por ejemplo, hago una cena con mi familia y al dar las 12 brindamos y comemos 12 uvas, nos abrazamos y nos damos buenos deseos. También hacemos algunos juegos tradicionales.
Aquí en México se realizan rituales el 31 de diciembre para invocar deseos para el Año Nuevo. Hay diversas costumbres y no todas las familias del país las realizan ni creen en ellas. La mayoría hace al menos una de ellas para llamar a la buena suerte.
Uno de los rituales más comunes en México es barrer la casa. Las personas barren sus casas con el objetivo de sacar las malas vibras, así como los malos momentos que se pasaron. La limpieza se realiza partiendo desde el último cuarto y concluye en la puerta de la entrada principal.
Otro es pasear por la calle con maletas. Es costumbre salir a pasear en la noche a la calle para atraer los viajes. Se tiene la creencia que de esta manera se atraen más vacaciones, y salidas para explorar el mundo, o bien, más vuelos por negocios durante el año.
Otro muy conocido es usar ropa interior de un color en específico. Utilizar ropa interior amarilla, roja y verde es de los rituales de Año Nuevo más practicados por los mexicanos. Y es que cada color significa desear diferentes cosas. Por ejemplo, el amarillo significa dinero, rojo es amor y verde es salud.
Comer 12 uvas es una de las más comunes en el mundo, y se realiza cercano a las 00:00 horas del 1 de enero, es decir Año Nuevo. La gente come 12 uvas, una por cada campanada que suenen al dar las 24:00 horas. Corresponde al número de meses y los deseos que quieres que se te concedan el próximo año.
Por último, comer lentejas, éstas son indispensables en la cena de los mexicanos, pues se creen que atraen la buena fortuna, la riqueza y el dinero. En el país se piensa que, si se come este platillo, el próximo año no faltará comida en la mesa de quienes la integran, a pesar de los malos tiempos que haya a lo largo del año.
¿Has practicado alguna vez una de estas costumbres? Yo sí, y es muy divertido, se pasa un muy buen momento en familia.
Pero, no en todas las culturas se festeja igual, por ejemplo, en Europa hay tradiciones muy curiosas.
En Dinamarca acostumbran a romper platos y saltar de sillas. Después de la cena de Nochevieja, los daneses lanzan la vajilla a las puertas de las casas de los seres queridos para demostrar su cariño y atraer a la buena suerte para el año que comienza. Otra costumbre muy curiosa de Dinamarca en Fin de Año es que saltan desde lo alto de una silla con la primera campanada. Esta peculiar tradición trae suerte a todo el que la hace.
El Bleigießen. El nombre de esta tradición está formado de dos palabras: «Blei», que significa plomo y «gießen», que significa regar. Se sostiene una cuchara sobre una llama para derretir pequeños trozos de estaño en forma de herradura, tan pronto como se funde, se arroja a un recipiente con agua fría. La pieza de metal duro resultante se mantiene a la luz de las velas y las sombras proyectadas en la pared son representativas del año que entra. De este modo, si la figurita tiene por ejemplo la forma de un barco, puede significar que te están esperando grandes aventuras. Este método de adivinación tiene sus orígenes en la antigua Grecia, pero ha sido adoptado por muchos países de habla alemana y nórdicos, incluidos Finlandia, Suiza y Austria.
En Grecia se acostumbra que, a la medianoche, todas las luces de casa se apagan y se tira una granada en el escalón de la puerta de entrada principal. Cuantas más semillas se derramen por el suelo, más próspero será el año.
En Asia en general el 1° de enero no se celebra el Año Nuevo, a excepción de Japón, país que para estas fechas se paraliza totalmente, ya que la totalidad de sus habitantes durante tres días completos se ocupan únicamente de los ritos que le dan la bienvenida al Año Nuevo.
Es difícil imaginar que un país tan agitado como Japón quede absolutamente paralizado, pero desde instituciones financieras hasta negocios de comida e incluso algunos hoteles y servicios de transportes detienen sus funciones el primero, dos y tres de enero para celebrar el Año Nuevo, la celebración más importante del año para esta nación, que tiene origen en la tradición shintoísta.
Es que esta fecha es fundamentalmente familiar, y nadie la pasa lejos de su hogar, en donde todos se reúnen el 31 a esperar la medianoche. Y una vez que comienza el nuevo año, luego de desearse mutuamente “Akemashite Omedetou Gozimasu”, algo así como “felicidades para el año que se inicia”, las familias inician un peregrinaje hacia los templos, con el objetivo de saludar a los dioses y de pedir por un buen año.
Así, durante tres días la mayoría de los japoneses visitan los templos, incluso más de una vez, por lo que las filas y las conglomeraciones son impresionantes, porque casi todos los nipones, incluso aquellos que no definen como religiosos, van a expresar sus deseos y a quemar aquellos objetos que ya no caben en el hogar.
¿Qué les parece radioescuchas? Si que son curiosas las tradiciones de otros países. ¿Cuál es gustaría practicar? A mi la de Dinamarca, de tirar platos fuera de las casas. Espero que hayan encontrado interesante esta información, yo soy Daniella Yorio y les deseo un muy buen año nuevo, cuídense mucho y escuchen En Onda Radial.