El cine en la nueva normalidad

Jess Collins | Opinión

Seguramente no soy la única persona que con la llegada de la pandemia dejó de ir a los cines por precaución; claro estuvieron cerrados mucho tiempo, pero desde sus reaperturas, me he quedado con las ganas de ver una película en una pantalla grande, comer palomitas y nachos con queso extra (mis favoritos) y simplemente la experiencia que supone ir al cine.

Por supuesto hay quienes ya comenzaron a ir, los cines incluso han anunciado sus butacas canceladas y medidas de seguridad que tienen para mayor confianza del cliente. Pero si usted es como yo, que prefiere no arriesgarse, sabe que todo lo anterior suena muy bonito pero no lo suficiente para convencernos de ir; sin embargo, el antojo sigue ahí.

Y como dicen: el mundo es de quienes se adaptan al cambio. Es por eso que le quiero platicar mi experiencia con el autocinema que se encuentra aquí en Xalapa y que aunque no es tan nuevo, aún hay gente que no se ha animado a conocer.

De entrada debo decir que está muy bien pensado, la pantalla es de buen tamaño, las personas que te reciben usan el cubrebocas todo el tiempo y los precios son bastante accesibles, pues el cobro se hace por vehículo y no por persona.

Como ventaja puedo decir que, aunado a los buenos precios, la parte de la comida no le pide nada a las dulcerías de cines ya conocidos, pues hay variedad, buenos sabores y además todo se lo llevan hasta su auto, sólo basta con prender las intermitentes y alguien se acercará a tomar su orden. Los baños están muy cerca y están limpios y como puede ver la película en la comodidad de su vehículo, no tendrá contacto con los demás asistentes.

Como desventaja, hay que mencionar que la calidad de la imagen depende también del clima, ya que si está nublado o con llovizna le resta claridad. Por otro lado hay que esperar alrededor de 20 o 30 minutos para entrar, pues debe terminar la función anterior para desocupar el espacio; aún así le recomiendo llegar temprano para que sea de los primeros en pasar y agarre buen lugar. Otra desventaja pude ser que el sonido de la película se recibe directamente en el radio de su automóvil, por lo que deberá estar pendiente de su batería y tal vez encender el vehículo cada tanto para evitar que se descargue.

Definitivamente no es la experiencia a la que estábamos acostumbrados, pero el concepto y la calidad que ofrecen valen mucho la pena y es algo que sin duda hay que probar. Sobre todo hay que entender que las cosas han cambiado, pero que eso no significa que debemos dejar de hacer lo que nos gusta, sólo hay que aprender a hacerlas de una forma diferente y más segura.

Quiero aclarar que esta columna no está patrocinada, pero en mi opinión hay que apoyar a la economía local así que puede escribir Autocinema Xalapa en el buscador de Facebook y ahí encontrará la cartelera, la dirección y la forma de apartar su lugar en la función de su preferencia.