8M: la transformación del muro en un antimonumento por las víctimas de feminicidios en México
El gobierno de Andrés Manuel López Obrador colocó vallas alrededor de Palacio Nacional pocos días antes de la marcha feminista del 8 de marzo, Día Internacional de la Mujer. Sus funcionarios aseguraron que era un “muro de paz” para evitar que se dañaran recintos históricos, lo que indignó a la ciudadanía.
Sin embargo, durante la noche del pasado 6 de marzo, un grupo de mujeres acudió al frente de Palacio Nacional y pintó los nombres de las víctimas de feminicidios en las vallas de tres metros de altura, convirtiendo el “muro de paz” una antimonumenta para exigir justicia por las víctimas de la violencia en México.
“No hay forma de callar los justos reclamos de las mujeres, por más que lo intenten. Intervención de las compañeras de CDMX en el muro que rodea el Palacio Nacional, enlistando los nombres de las víctimas de feminicidio en el país”, escribió el colectivo Brujas del Mar al compartir las imágenes de las pintas.
Entre los nombres que destacaron en la “muralla de la paz” estuvo el de Ingrid Escamilla, Brenda Josselín, Wendy, Paloma, María Assaf, Ivonne Jocelyn, Eloisa, María de Jesús y Fátima, por destacar algunos.